Uno de los temas trabajados durante el proyecto fue el problema que supone encontrarse con los contenedores de reciclaje llenos y las bolsas acumuladas a su alrededor. Esto, no sólo provoca problemas de insalubridad también implica que el material ya no pueda ser reciclado al no estar clasificado, y desanima a las personas que intentan hacer las cosas bien separando la basura en sus casa y trasladándola hasta estos puntos de recogida.

        Aprovechando la existencia de materiales asequibles de electrónica como las placas de arduino y la multitud de sensores disponibles, desde la materia de robótica buscamos una idea para solucionar este roblema. El primer intento era un dispositivo que media la distancia a la que se encontraba la basura de la capacidad máxima del cubo y enviaba un aviso por bluetooht (el alcance es de tan solo de 10 a 15 metros) esta idea original pronto fue creciendo hasta llegar a nuestro prototipo PRIAS que realiza las siguientes funciones: 

1. Avisa cuando el contenedor está lleno con una luz roja a los usuarios (verde si está vacío), y con un mail a la empresa encargada de recogerlo.

2. Contabiliza el número de reciclajes que se realizan

3. Cada vez que se recicla la persona recibe un código que puede comprobar en una web para ver si ha resultado premiado o no. Con esto se intenta incentivar el reciclaje y premiar a las personas que intentan conservar el medio ambiente, un bien común de todos.

4. Sensores de peso realizan mediciones cada x tiempo y envían la medición final cuando el cubo está lleno de manera que el esfuerzo realizado repercuta sobre la sociedad 

5. Todos los datos recogidos por los sensores, distancia, día, mes, hora de reciclado, códigos, peso,... se envían a una página pública ThingSpeak, en el canal prias, para poder ser analizados por cualquier persona interesada y extraer conclusiones que nos permitan mejorar la gestión de estos recursos.